Partido Comunista de España: La historia de un siglo.

Segovia, 14 de noviembre de 2021

Carlos Serrano Hermo, Secretario provincial de PCE Segovia y responsable mmss de IU Segovia

Como en el resto de Europa, el terremoto causado por la Revolución de octubre de 1917 motiva el surgimiento del comunismo en España. El 14 de noviembre de 1921 nació el Partido Comunista de España fruto de la fusión de dos pequeños partidos comunistas, el Partido Comunista Español y el Partido Comunista Obrero Español. Desde entonces, la historia de España no se entendería sin la acción política de los comunistas. Hasta los mayores adversarios reconocen la lucha abnegada contra las dictaduras y para traer al país la libertad. Una lucha primero frente a la monarquía, las élites y la nobleza, después en el contexto de la dictadura de Primo de Rivera, posteriormente en defensa de la II República, durante la guerra o en la larga noche de la dictadura franquista.

Son innumerables las historias de hombres y mujeres que a lo largo de este siglo han dedicado lo mejor de sí mismos para construir un mundo nuevo y mejor para las siguientes generaciones. Siempre lo mejor del PCE fueron sus militantes, personas que dejaron todo lo que tenían, a veces incluso jugándose la libertad o la vida, para luchar al servicio de la clase trabajadora, la paz y la igualdad.

También en nuestra provincia los comunistas escribieron su parte de la historia durante este siglo. El PCE en Segovia tuvo su origen en el inicio de la Segunda República con nombres como José Urquiza, Alejandro González “Alex” y Alejandro González “Cartabón”, que posteriormente serían fusilados por Franco. Inicialmente la organización solo contaba con unos pocos afiliados en la capital, pero durante la primavera de 1936 tuvo un crecimiento importante, con un papel imprescindible por parte de “Alex”, presidente de la Casa del Pueblo de Segovia.

De gran importancia fue el papel de su organización juvenil, ya que las Juventudes Socialistas Unificadas contaron con un importante peso, unas 200 personas en la capital además de otras cuantas más entre Valsaín, La Granja y Cuéllar. La base militante se amplía hasta llegar a unas 640 personas en julio de 1936 (como dato comparativo, Zaragoza tenía apenas 340). Con la sublevación militar, la mayoría de los militantes de la sierra y la capital van a Madrid y se alistan en el batallón Thaelman, y después en el Batallón Alpino en Navacerrada.

Hay varios hitos más a destacar, como la formación de las Milicias Segovianas Antifascistas por parte de Agapito Marazuela y las acciones guerrilleras republicanas por parte de “Cartabón”, ambos desde el Centro Segoviano de la ciudad de Madrid en plena guerra. El papel de las mujeres en cárcel de Segovia, con especial representación de Palmira San Juan, o los dos intentos de reorganización del PCE en el 1941 y 1947 que fueron desmanteladas por la policía franquista.

Tampoco se puede pasar por alto el papel que ha tenido el PCE en la provincia desde la Transición hasta la actualidad. Desde la construcción de una célula clandestina por gente como Nicolás Berzal, la participación en la conocida “Platajunta”, la formación de las Comisiones Obreras, la implantación de IU en la provincia… Pero también la participación en infinidad de movilizaciones sociales, como en las campañas de Objeción de Conciencia, reclamando el 0,7, en el movimiento ecologista y feminista, las diferentes movilizaciones por la paz o en la inspiración del primer Foro por la Memoria estatal en 2002.

En definitiva, si hubiera algo que destacar durante estos cien años de los comunistas, sería sin duda, su constante participación en la lucha política por los derechos civiles, sociales y democráticos, tanto a nivel estatal como en la provincia de Segovia.

Sin embargo, en el día de hoy se hace absolutamente necesario que los comunistas no solamente conmemoramos nuestros cien años de lucha y recordemos a los camaradas que nos precedieron y a quienes nos hacen sentir orgullosos de lo que somos. Hoy es un día en que es imprescindible que miremos al horizonte. Porque el futuro cada vez está más lleno de incertidumbres. Porque ya nadie tiene duda de que no hemos llegado al final de la historia. Porque como hemos visto muchas veces en estos cien años los tiempos difíciles se ciernen sobre nosotros. Y es en esos momentos difíciles cuando los comunistas españoles, gracias a su disciplina, su organización, su formación y su programa, tendrán que ponerse una vez más al frente para garantizar los derechos sociales, civiles y la dignidad de la clase trabajadora y el futuro del país.

Así que, recuerden camaradas, hoy celebren por todo lo alto su historia porque mañana volveremos a nuestra incansable tarea de construir un mundo nuevo, sin reyes, ni tribunos y donde los parias de la tierra y los nada de hoy todo lo han de ser.

¡Viva el Partido Comunista de España!